El exsubdirector de la Unidad de Gestión del Riesgo de Desastres, Sneyder Pinilla —una de las principales fichas del entramado de corrupción en el que se malversaron dineros públicos y se repartieron en coimas— fue condenado a cinco años y ocho meses de cárcel. Gracias a un preacuerdo que logró con la Fiscalía, se logró una reducción del 45 % de la pena. Pinilla fue imputado por los delitos de concierto para delinquir agravado y peculado por apropiación.
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Sneyder Pinilla fue uno de los cerebros del escándalo de corrupción de la UNGRD Foto:Sergio Acero. EL TIEMPO
Pinilla seguirá recluido en el Batallón de Artillería Fernando Landazábal Reyes. Por los agravantes de sus delitos no podrá acceder a beneficios como la casa por cárcel. Sin embargo, por razones de seguridad, no será enviado a un centro penitenciario.
“Es necesaria esta medida para garantizar los fines constitucionales de protección a su vida e integridad, teniendo en cuenta que este ciudadano está colaborando con la Fiscalía y que su seguridad se ha visto seriamente comprometida, como lo reveló el estudio de evaluación técnica de amenaza y riesgo, que lo clasificó en nivel extremo», dijo la jueza.
De hecho, durante la audiencia la jueza dio a conocer un incidente en el que se solicitó el traslado de otro privado de la libertad, según el reporte, por seguir sospechosamente las actividades y movimientos de Pinilla al interior de la guarnición militar.
Imputación a Olmedo López y Sneyder Pinilla por caso de la UNGRD. Foto:Archivo particular
Finalmente, la jueza leyó el fallo: “El Juzgado 10 Penal del Circuito Especializado de Bogotá resuelve condenar a Sneyder Augusto Pinilla Álvarez, en calidad de autor y coautor impropio, respectivamente, de los delitos de concierto para delinquir agravado en concurso heterogéneo con peculado por apropiación, a la pena de cinco años y ocho meses de prisión, y al pago de una multa equivalente a 3.556 salarios mínimos legales mensuales vigentes”.
La defensa aceptó la sentencia y no interpuso recursos. Solo solicitó correcciones de forma en tres apartados, que serán ajustadas en el texto definitivo de la sentencia y entregadas a las partes.
El otrora subdirector de la Unidad se declaró culpable de los cargos que se le imputaron y ya ha devuelto parte del monto fijado como reparación. Ha hecho dos consignaciones: una en diciembre del año pasado por 310 millones de pesos, y otra en marzo de 2025 por 308 millones. Estos pasos son imprescindibles para lograr pactar con la fiscalía y obtener la sentencia reducida que la fue impuesta.
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Entre quienes llegaron a una resolución negociada del proceso están el exdirector de la entidad, Olmedo López; Pedro Rodríguez Melo, exasesor; Luis Carlos Barreto, ficha de César Manrique, exdirector de Función Pública; Luis Eduardo López, conocido como ‘el Pastuso’; y el abogado Édgar Riveros.
Todos pactaron penas anticipadas, siendo la más alta la del exdirector de la Unidad. Según lo acordado con la Fiscalía, Olmedo López deberá pagar siete años y 12 días de cárcel por los delitos de concierto para delinquir y peculado por apropiación.
Sneyder Pinilla Foto:Archivo particular
Además, deberán devolver parte de los 48.600 millones de pesos desfalcados a las arcas públicas. En los últimos meses han comenzado a llegar los giros: 500 millones de los 1.000 pactados por Rodríguez Melo, y 362 millones que salieron de la chequera de López.
Los hechos
La desviación de recursos de la Unidad de Gestión del Riesgo de Desastres ha salpicado hasta ahora a más de una decena de funcionarios, entre ellos al exministro del Interior Juan Fernando Velasco, al exministro de Hacienda Ricardo Bonilla y al actual ministro de Salud, Guillermo Jaramillo.
El escándalo tiene varias aristas. Entre ellas, el direccionamiento de contratos a congresistas —por el que recientemente fue vinculada la senadora del Pacto Histórico Marta Peralta—, los sobornos en efectivo a las cabezas del Congreso para aceitar las reformas sociales del Gobierno en el Legislativo y los sobrecostos en los carrotanques que resultaron inoperantes para abastecer las rancherías de La Guajira, la misión para la que fueron adquiridos.
En diciembre pasado, la Fiscalía le imputó a la exconsejera para las regiones Sandra Ortiz los delitos de lavado de activos y tráfico de influencias por este entramado, y se convirtió en la ficha más alta del sanedrín del Gobierno en ir a la cárcel por el escándalo.
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El escándalo tiene varias aristas. Entre ellas, el direccionamiento de contratos a congresistas —por el que recientemente fue vinculada la senadora del Pacto Histórico Marta Peralta—, los sobornos en efectivo a las cabezas del Congreso para aceitar las reformas sociales del Gobierno en el Legislativo y los sobrecostos en los carrotanques que resultaron inoperantes para abastecer las rancherías de La Guajira, la misión para la que fueron adquiridos.
Corte podría tumbar medida de Petro sobre conmoción interior Foto:
En diciembre pasado, la Fiscalía le imputó a la exconsejera para las regiones Sandra Ortiz los delitos de lavado de activos y tráfico de influencias por este entramado, y se convirtió en la ficha más alta del sanedrín del Gobierno en ir a la cárcel por el escándalo.
Sara Valentina Quevedo Delgado
Redacción Justicia