Dos reuniones en Casa de Nariño, con el presidente Gustavo Petro a bordo; tres juntas directivas para evaluar los coletazos del escándalo; renuncias irrevocables e investigaciones de la Procuraduría y la Contraloría.
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Pero la junta de la estatal terminó emitiendo un comunicado, el pasado jueves, en el que dice que el contrato sí existe, que fue suscrito a sus espaldas y que cuando lo descubrieron, fue suspendido. No obstante, aún hay piezas que no encajan.
Golpe a la iguana
El ejecutivo de Ecopetrol, Alberto Vergara Monterrosa; y Ricardo Roa, presidente de la petrolera. Foto:Archivo particular
Lo único claro, hasta ahora, es que el escándalo desplazó otros temas de la agenda nacional y agitó de nuevo el de la inminente salida de Ricardo Roa de la presidencia de la compañía que se habría concretado en Palacio para agosto.
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De hecho, este diario estableció que la estatal (cuya imagen es una iguana) ya está en el radar de la Comisión de Bolsa y Valores de Estados Unidos (SEC) que vigila a las compañías que cotizan en la sensible Bolsa de Nueva York. Y hay un dato más fresco: el escándalo está siendo usado por altos funcionarios del Gobierno para imponer al sucesor de Roa y desacreditar candidatos.
La sede de la firma Covington & Burling en EE.UU Foto:Archivo particular
Roa es el epicentro del contrato con la oficina de abogados estadounidense Covington & Burling LLP, con el que la junta buscaba medir el impacto ante las autoridades estadounidenses de las investigaciones en su contra, en su rol de gerente de la campaña Petro Presidente 2022-2026. La Procuraduría ya conceptuó que debe ser procesado por violar topes electorales, conducta con alcances penales.
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Pero todo parece indicar que los alcances del contrato se usaron para otros fines.
Cambio de partitura
Mónica de Greiff renunció a la junta directiva de Ecopetrol. Foto:Archivo particular
Después de la sorpresiva renuncia de Mónica de Greiff a la junta (el martes en la noche), empezó a circular una auditoría interna que confirma las revelaciones de EL TIEMPO y señala que desde la estatal se ordenaron incluso perfilamientos a varias personas incluidos tres miembros de junta y externos (ver nota anexa).
Hasta el viernes, todos en Ecopetrol venían manejando la misma partitura: que el otrosí se suspendió en marzo cuando descubrieron extralimitaciones y que fue a espaldas de la junta. Pero en el informe de auditoría, fechado el 20 de mayo, hay otros datos relevantes.
Este se enfoca en la conducta de Alberto Vergara, gerente de cumplimiento de la estatal. Se dice que Covington les entregó una comunicación a personal entrevistado indicando que en nombre de la junta debían entregar los dispositivos electrónicos asignados por la compañía (celular y equipo de cómputo) y se efectuó una copia masiva de información.
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En video, Vergara negó el contenido de la auditoría, dice que ha actuado apegado a la ley y que “todo es un ataque mediático de quienes se quieren quedar con la compañía” y buscan sacarlo del camino por denunciar redes de corrupción.
Documentos encriptados
Ministro de Minas y Energía, Edwin Palma. Foto:Ministerio de Minas y Energía
Lo que ahora se está destapando es que entraron al juego dos fuerzas dentro del gobierno Petro que empezaron a presionar por designar al sucesor de Roa. En medio de ese pulso han empezado a circular documentos encriptados con señalamientos en contra de uno de los más opcionados candidatos: el ministro de minas, Edwin Palma, expresidente de la USO .
Cuando comenzó a sonar, se habló de una inhabilidad por haber salido de Ecopetrol hace años, firmando un retiro voluntario. Pero ahora le endilgan “un plan para transformar a Ecopetrol en un instrumento de poder político y plataforma de ascenso electoral”.
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“Se han alineado intereses políticos, estrategias burocráticas y presiones internas. (…) Su posición ideológica es radical”, se lee en documentos y se habla de que ha cambiado a 40 de 70 cargos técnicos en la cartera de Minas por recomendados de miembros del gabinete y gente investigada.
Junta directiva de Ecopetrol para mayo de 2024. Foto:Archivo particular
“Son ataques normales cuando un nombre está sonando para un cargo clave, pero ni siquiera he sido notificado de mi paso a Ecopetrol. Ahí no hay nada en contra mía, no tengo cola. Lo único es lo ejecutado en estos dos años de Gobierno. Hacer cambios en el ministerio es normal, cada torero llega con su cuadrilla”, le dijo Palma a EL TIEMPO.
Mientras tanto, la junta de Ecopetrol aún no ha salido a explicar por qué no había dado aviso a autoridades sobre las irregularidades en la ejecución del otrosí y tuvieron que ser reveladas por EL TIEMPO.
(Consulte acá todos los artículos de la Unidad Investigativa de EL TIEMPO)
Tampoco han dicho a qué miembros de junta y particulares se perfiló desde la estatal y cuáles fueron los hallazgos.
Y sobre Roa, se insiste en que pasará a la cartera de Minas en donde quedará con fuero en caso de que las investigaciones en su contra prosperen.
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