La tranquilidad de la tarde del miércoles en la localidad Suroriente de Barranquilla se vio abruptamente interrumpida por un vendaval que arrasó con techos y causó estragos en varias viviendas de los barrios San Rafael y Buena Esperanza. Las intensas ráfagas de viento estuvieron acompañadas de lluvias torrenciales que terminaron provocando momentos de pánico entre los habitantes.
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Vendaval deja varias viviendas destechadas en Barranquilla. Foto:Cortesía
Estábamos en la sala cuando de un momento a otro sentimos cómo el viento empezó a levantar el techo. Las láminas de eternit se desprendieron con un estruendo, algunas cayeron al suelo, otras salieron volando. Intentamos abrir la puerta para bajar, pero estábamos bloqueados. El susto fue tan grande que solo atiné a asomarme al balcón y gritar que se me había caído el techo, esperando que alguien viniera a ayudarnos
Mónica CalderónAfectada
Mónica y su familia lograron ponerse a salvo minutos después, pero su vivienda quedó parcialmente descubierta, con severos daños en el cielo raso y el sistema eléctrico.
Vendaval deja varias viviendas destechadas en Barranquilla. Foto:Cortesía
A tan solo una cuadra, en la calle 45 F, Duván Herrera, otro vecino, fue sorprendido por la tormenta mientras caminaba por el andén. Buscando refugio, ingresó a una tienda del sector para ayudar a la dueña, cuya mercancía voló hasta la calle por efecto de los vientos. En medio del caos, ignoraba que su propia casa estaba siendo destruida.
Tras los reportes ciudadanos, el Cuerpo de Bomberos de Barranquilla se desplazó rápidamente al lugar para atender la emergencia. También hicieron presencia funcionarios de la Oficina de Prevención y Atención de Desastres, quienes comenzaron el censo de las familias damnificadas.
Las autoridades confirmaron que, pese a los daños materiales considerables, no se reportaron personas heridas. Sin embargo, varias familias debieron ser evacuadas de manera preventiva por el riesgo de colapso estructural.
Vendaval deja varias viviendas destechadas en Barranquilla. Foto:Cortesía
Al mismo tiempo, en el barrio Buena Esperanza, en la carrera 19 con calle 63B, las lluvias intensas también causaron estragos. Varias viviendas sufrieron destechamientos, se registró la caída de árboles y la interrupción del servicio de energía eléctrica afectó a buena parte del vecindario.
“No sabíamos si correr, si quedarnos. Solo escuchábamos golpes y cosas volando por encima del techo”, comentó Andrea Peralta, una vecina que presenció cómo la casa de su tía perdió parte de su cubierta.
Las autoridades locales hicieron un llamado a la comunidad a mantener la calma y tomar medidas preventivas durante esta temporada de lluvias. Además, recomendaron:
- Asegurar techos.
- Podar árboles cercanos a las viviendas.
- Tener a la mano elementos básicos de emergencia como linternas, botiquín y documentos importantes protegidos.
El fenómeno, aunque de corta duración, evidenció la vulnerabilidad de varias zonas residenciales de la ciudad ante eventos climáticos extremos. La Oficina de Gestión del Riesgo continúa realizando visitas técnicas en los sectores afectados para evaluar el alcance de los daños y brindar asistencia a las familias damnificadas.